Ya estaba harta del tema jerseys. Me quedan cortos de manga. Y no me quedan largos como me gustan. Soy alta. Tengo los brazos largos. ¿Solución? He empezado a hacérmelos yo. Así tienen el tamaño que yo quiero, y el color, y la forma,… Además, es una terapia. Es relajante, depués de la cena, eseVer más ⟶
Quería poner una alfombra en la entrada, y quería hacerla yo. ¿Sería capaz de tejer una alfombra? ¡Pues claro que sí!
Las medidas de prevención de covid, nos hacen pasar frío. Esto fue una reacción en cadena. Hice unos mitones para mi hijo, para que los utilizara en clase. Mi marido me pidió otros para él, para trabajar. Mi amiga se apuntó, y después me apunté yo. Los hice todos con lanas que ya tenía enVer más ⟶
Cuando empecé a hacer más punto, eché de menos tener una bolsa para guardarlo. Descubrí este diseño que me encantó, así que me puse manos a la obra. Es reversible. El lado verde es una tela de una funda de edredón que tengo para reutilizar. Y el agujero para pasar la lana me pareció genial…
“Mamaaaaá”,… y mamá piensa “Ayyy, por dónde saldrá ahora”. Yo quiero tener algo que hagas tú con eso (estaba haciendo un estropajo de punto con cuerda de cáñamo). Pero, ¿qué quieres que te haga?. Después de darle vueltas, este fue el resultado…
De repente, descubro la que estoy liando con el estropajo verde. Yo que pensaba que como no era desechable, estaba bien usarlo. ¡Pues no! Resulta que cuando el estropajo éste se va gastando, lo que suelta (las mijitas verdes que suelen irse por el desagüe), son microplásticos. Y esos microplásticos terminan siendo en muchas ocasionesVer más ⟶
